De suspensos y aprobados...

Navegando por la maraña de documentos que pueblan infectan y llenan mi portatil di con una reflexión planteada hace tiempo con motivo de una fiesta que hicimos en casa de unos amigos. La fiesta estaba dedicada a los suspensos ya que se realizaba después de los exámenes de febrero. Yo realicé y escribí el texto de entrada a la fiesta, que no es otro que el que reproduzco aquí abajo. El final está modificado ya que incluía ciertas normas de la fiesta que hoy no vienen al caso.



El estudiante, aquel ser desconocido del que todos hemos oído hablar pero que nadie en realidad conoce. Se dice se alimenta de textos bibliográficos, prácticas y exámenes. Se reproduce mediante matrículas, se sospecha que actualmente incluso por cibermatrículas. Su hábitat natural son las bibliotecas y las aulas universitarias y huyen del calor por lo que en los meses de verano abandonan su hábitat hacia zonas más tranquilas donde dejan de alimentarse para prepararse para su reproducción en septiembre.

Como resultado de su sobrealimentación en los meses de febrero y junio se produce un efecto no deseado para el estudiante que comúnmente se conoce como suspenso. ¿Qué es el suspenso? ¿De qué se forma?
Los expertos han resuelto que el suspenso es el resultado de la siguiente ecuación:
Sueño durante las clases + apuntes mal cogidos + partidas de mus (esta variable puede cambiarse por cervezas, toros, sexo en los mejores casos, o la suma de todas ellas, en cuyo caso esta variable resultaría suficiente para obtener un suspenso) + sueño durante el estudio (variable incrementado por el número de amigos con los que se estudie y el número de moscas en la habitación) + litros de alcohol injeridos en ese periodo + un profesor cabrón (otra especie de las desconocidas en el misterioso hábitat de las universidades) + bloqueo en el examen = Suspenso.

Estos entes tienen una variable conocida como aprobados, pero nadie jamás ha visto alguno de ellos en la universidad (salvo en periodismo, publicidad, magisterio y demás “carreras”) y se ignora si su existencia es verdadera o no.