domingo, 29 de noviembre de 2009

Poesía para amanecer lluvioso

Antonio Machado - Amanecer de otoño

Una larga carretera
entre grises peñascales,
y alguna humilde pradera
donde pacen negros toros. Zarzas, malezas,jarales.

Está la tierra mojada
por las gotas del rocío,
y la alameda dorada,
hacia la curva del río.
Tras los montes de violeta
quebrado el primer albor:
a la espalda la escopeta,
entre sus galgos agudos, caminando un cazador.

2 comentarios:

piero dijo...

Qué bien encaja esta entrada con el día...gracias.

txïo [patito-feo.es] dijo...

Poesía y lluvia: ¿hay algo más hermoso?